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Mostrando entradas de octubre, 2013

Un pequeño regalo

Paseaba por el parque entre las sombras que proyectaban los árboles sobre el suelo y los rayos de sol que se abrían paso entre las hojas. Los sonidos de la naturaleza ganaban la batalla a los estridentes ruidos de la ciudad. En aquel instante solo podía oír mis pisadas en el suelo, aún húmedo después de la lluvia. Al final del sendero se dibujaba la figura de una mujer sentada en un banco. A cada paso que daba un desgarrador sonido me invadía. Mientras me acercaba, pude comprender que la tormenta no había pasado para ese triste corazón ahogado en penas. Aquella desconocida sola y abatida me tocó el alma. Cuando estuve a su altura, no supe qué decir ni qué hacer, pero algo me impedía pasar de largo y olvidar su llanto. Me detuve y la miré en silencio, y ella me devolvió la mirada; una funesta mirada que me arrastró hacia un abismo, se introdujo en mí e invadió cada rincón. Me senté a su lado, me acerqué lentamente y la abracé. No dijo nada, pero poco a poco se fue calmando. Cogió mi ma

Despedida

Anoche, mientras lloraba en la oscuridad y miraba las estrellas por la ventana, pensé que debía escribirte, que debía dejar constancia de este momento, pero el cansancio del llanto hizo que me quedase dormida. Hoy todo parecía volver a la normalidad, pero no era más que un engaño, realmente seguía pensando en ti. Hace un rato me senté frente al ordenador y mi mente trajo al presente un recuerdo que hizo que las lágrimas volviesen a brotar de mis ojos. Entonces decidí escribirte y decirte lo que viene a continuación: Y aún tengo en mi mente ese instante, tan nítido que puedo dibujar cada detalle. Te miraba a través del espacio que había entre el muro de la casa y las ramas de los árboles y las lágrimas no dejaban de caer por mis mejillas. La misma sensación que tuve entonces, la tuve ayer y la tengo ahora. Te marchas en busca de tu felicidad, esa que tanto he deseado para ti, pero saber que te vas tan lejos y que no hay fecha prevista para nuestro reencuentro es razón suficiente para